jueves, 31 de julio de 2014

Cortometrajes Anime Cineteca Nacional: Un médico rural de Kafka (Kafuka Inaka Isha, 2007) de Koji Yamamura


Cortometrajes Anime Cineteca Nacional: Cuadros de una exposición (Tenrankai no E, 1965) de Osamu Tezuka


Cortometrajes Anime Cineteca Nacional: Cine desglosado (Onborofirumu, 1985) de Osamu Tezuka


Cortometrajes anime Cineteca Nacional: Brincando (Janpingu, 1984) de Osamu Tezuka


Cortometrajes anime Cineteca Nacional: Cuarto de Baño (Basurumu, 1972) de Yoji Kuri


Cortometrajes Anime Cineteca Nacional: Amor (Ai, 1963) de Yoji Kuri

En el ciclo de animación japonesa de la Cineteca Nacional pudimos disfrutar cortometrajes de animación de distintas épocas. La gran mayoría son un tanto difíciles de conseguir, pero algunos si están en Internet como éste: Amor (Ai, 1963) de Yoji Kuri.

Trataré de postearles algunos de los mencionados cortometrajes. Mientras, aquí les dejo éste.






Misterio, magia, Miyazaki


sábado, 26 de julio de 2014

Gen de los pies descalzos

Sábado de anime en la Cineteca Nacional con función gratuita incluida y algunas lágrimas del público presente. En esta ocasión, el resumen en la página web de la cineteca dice:

“Cinta basada en el manga autobiográfico de Keiji Nakazawa, un superviviente de la bomba atómica de Hiroshima. La película muestra, desde el punto de vista de Gen, el niño protagonista, el antes y el después de la caída de la primera bomba. La vida en Hiroshima durante los últimos años de la Segunda Guerra Mundial es retratada a través de las vivencias de una familia japonesa, en una ciudad en la que sus habitantes sufren la escasez de alimentos y el constante miedo por ser atacados”.



   De nueva cuenta tenemos una historia anti bélica en la que se muestran los horrores de la guerra a partir de las víctimas inocentes. En 1945, en la ciudad de Hiroshima, Gen es un niño que junto con su hermano menor vive el día a día en una ciudad en la que los bombardeos son constantes y la comida escasea. En una de esas, la detonación de la primera bomba atómica lanzada sobre una ciudad nos muestra algunos de los horrores que muchos libros de historia no siempre revelan.

   Por un lado, se invita al espectador a pensar en quienes murieron instantáneamente. Madres con sus niños, jóvenes y ancianos fueron vaporizados al instante. En segundo lugar los sobrevivientes. Miles de personas malheridas y deformadas que en poco tiempo murieron debido a las heridas. También tenemos a los soldados y demás personas a quienes la radiación afectó e hizo que murieran de cáncer y leucemia.

   Un de las escenas más fuertes es la de los recogedores de cadáveres. Teniendo decenas de miles de muertos, estas personas tuvieron que recoger y quemar casi todos los cuerpos que se fueron encontrando.

   Pero la cinta también tiene un componente trágico para Gen. Poco a poco, irá perdiendo a varios de sus familiares y tendrá que aprender a vivir en una ciudad devastada.

   El tono antibelicista en esta cinta es mucho más sincero y menos adornado. Se retrata sin ninguna censura ni piedad a las víctimas de la bomba atómica. Del mismo modo, la cinta nos ofrece un retrato de una infancia interrumpida que debe enfrentarse a la catástrofe y a la muerte.

   Una cinta casi a la altura de La tumba de las luciérnagas. Sin embargo, Gen de los pies descalzos deja abierto un final con algo de esperanza mientras que la cinta de Isao Takahata es mucho más cruda: en una terrible guerra y para muchos, la esperanza también murió y no hubo segunda oportunidad.

   En definitiva, una cinta poderosa que nos muestra una cara cruda sobre las víctimas de la guerra.




viernes, 25 de julio de 2014

La arcadia de mi juventud

Continuamos con un viernes lleno de animación japonesa disfrutando de una cinta clásica que demuestra que estos productos audiovisuales pueden ofrecer historias adultas desintoxicadas de muchas ideas occidentales. En la página web de la Cineteca se lee el resumen:

   “Cuando los extraterrestres conquistan la Tierra y esclavizan a la raza humana, toda esperanza de la libertad se pierde. Pero un hombre no se dará por vencido: el capitán Harlock, un valiente piloto del espacio que dirige a la resistencia y promete restaurar la libertad de su planeta. Aunque la historia nació del manga y se popularizó en una serie animada, la película profundiza en los orígenes del héroe antes de convertirse en un pirata del espacio que lucha contra gobiernos totalitarios”.



   Lo primero que vino a mi mente cuando estaba disfrutando la cinta es que ya la había visto  en el legendario canal 5 de México cuando tenía cinco o seis años. Lo curioso es que no recordaba en absoluto al capitán Karlock, mas mi mente trajo recuerdos a los otros personajes.

   La trama de ciencia ficción es de lo más interesante. En el siglo XXX, la humanidad ha sido casi destruida por una poderosa raza alienígena con forma humanoide. Dicha raza en expansión ya ha conquistado y destruido sin piedad otros mundos. En una Tierra post-apocalíptica, el capitán Harlock, con ayuda de unos cuantos amigos, conseguirá inspirar a la resistencia humana e inclinar la balanza a favor de los terrícolas.

   La estética es de lo mejor. Se utilizan batallas espaciales que recuerdan a las clásicas batallas de barcos piratas. De la misma forma, los aviones empleados en la trama recuerdan poderosamente a muchos de los combates aéreos de la Segunda Guerra Mundial. Incluso hay muchos flashbacks en donde se cuenta una bella historia de amistad: a través de las generaciones, los ancestros de Harlock y Tochiro se han encontrado y ayudado, viviendo grandes aventuras.

   Pero también llama poderosamente la atención la formación del héroe. Harlock no quiere poder ni renombre, sino sólo desea hacer justicia. Siendo un pirata y un viajero de las estrellas, tiene todo el universo para sí mismo, por lo que no le interesa tener poder o una patria establecida.


   En definitiva, una larga, exquisita y bien trabajadas cinta que nos pasea por el origen de un gran héroe que no desea la gloria pese a que ha salvado al mundo.


jueves, 24 de julio de 2014

La leyenda de la nieve

Continuamos de vacaciones y disfrutando de este ciclo de anime en la Cineteca Nacional. Sería interesante si este recinto cinéfilo ofreciera de vez en cuanto los últimos títulos cinematográficos en cuanto a animación japonesa se refiere.

   Mientras tanto, en el resumen de la página web del mencionado recinto se lee:

   “Yuki, un espíritu de la nieve que vive en el cielo, es enviado a la Tierra con la misión de combatir a seres malvados y ayudar a la gente. Es la época feudal en Japón y Yuki desciende a una aldea, enfrentando valientemente a una banda de ladrones. Los aldeanos, alentados por el valor de Yuki, van superando una serie de adversidades que los aquejaban. Sin embargo, deberán enfrentar un reto mayor cuando un demonio que vive dentro de un volcán emerge para destruir todo a su paso”.



   Esta cinta es una muestra de que también en la animación se pueden abordar problemas políticos y sociales. En una aldea azotada por bandidos, Yuki es enviada para tratar de poner orden. Gracias a su ayuda, los bandidos serán eliminados. Sin embargo, una vez que termina una amenaza inicia otra: grupos de guerreros samuráis extorsionan a los aldeanos, mas nuevamente la ayuda de Yuki y una buena organización de los pobladores ayudará a combatir la amenaza. Pero si eso no fuera suficiente, uno de los magnates y gobernantes del pueblo también quiere aprovecharse de la situación.

   La cinta no remite por un lado a la idea de que una sociedad organizada y unida puede revelarse contra la opresión. Si bien las amenazas son eliminadas, siempre llegarán nuevos villanos que desearán aprovecharse de los débiles y gobernar de la forma más déspota.

   El personaje de Yuki es de lo más interesante. A pesar de ser una especie de ser sobrenatural, su valentía y astucia permitirá inclinar la balanza a favor de los buenos. Lo curioso es que nunca utilizará ningún recurso sobrenatural para detener a los malos. Esto es curioso: en una historia de fantasía, los escritores y guionistas muchas veces no pueden evitar inventar más de un recurso mágico. Sin embargo, en esta cinta, un personaje sobrenatural que no usa nada de magia ofrece un buen panorama para llevar la historia por otros linderos.


   En definitiva, una película con un buen componente social y fantástico que explota la naturaleza humana y, en especial, la situación entre el opresor y los oprimidos. 

miércoles, 23 de julio de 2014

Galaxy Express 999

Continuamos con el ciclo de animación japonesa explorando en esta ocasión algunas películas realizadas a finales de los 80’s y principios de esa década. En esta ocasión ha tocado el turno a Galaxy Express 999. El resumen de la página web de la Cineteca Nacional dice:

  “En un futuro donde los humanos aprendieron a transferir sus mentes a cuerpos robóticos, otorgándoles así la inmortalidad, el joven Tetsuro se convierte en un delincuente callejero después de que el conde Mecha asesinara a su madre. El gran anhelo de Tetsuro es obtener algún día suficiente dinero para abordar el Galaxy Express 999, un tren que tiene como destino final un planeta donde los cuerpos mecánicos son ofrecidos de forma gratuita”.



   Lo primero que llama la atención es que esta cinta es un resumen de la serie del mismo nombre que consta de 113 episodios. No sé qué piensen ustedes, pero resumir tal cantidad de episodios en dos horas podría ser un buen ejemplo de cómo comprimir o resumir largas historias dejando solamente los mejores elementos de la historia.

   Por otra parte, su uno hace caso omiso de la extensa serie, la cinta juega con falsos finales que por momentos pueden resultar confusos. Hay un momento en donde Tetsuro consigue vengar a su madre, mas lo que parecería ser el final de la película en realidad sólo es la conclusión de una de las varias secciones en las que está dividida esta producción.

   Un aspecto interesante, aunque ya manejado en la literatura, es la idea de que la moda en el distante futuro de la cinta consiste en abandonar el cuerpo humano para conseguirse uno robótico y así alcanzar la inmortalidad. Pese a que esta práctica puede estremecer a más de uno, la trama juega con un aspecto moral derivado del uso de los robots: la pérdida de lo humano y la adquisición de una identidad artificial y vacía.

   Como muchos finales de películas de animación japonesa, todo se lo carga el carajo. Es decir, al final los buenos ganan no sin antes que se desaten toda suerte de explosiones tras explosiones.


   En definitiva, una película muy movida e interesante que invita al espectador a acercarse a la serie original, a las películas, OVAs, Spin-offs, etc.


martes, 22 de julio de 2014

El gato con botas

Iniciamos esta semana con más películas del ciclo “Anime. La animación japonesa de posguerra”. En esta ocasión, la Cineteca Nacional ha ofrecido un panorama interesante de la animación en Japón durante la década de los 60’s. El gato con botas es la cinta que en esta ocasión nos ha tocado disfrutar. Primero lean el resumen:

“Pero es un gato con botas que ha sido condenado a muerte por ayudar a un ratón. En su huida del Clan de los Gatos, conoce a Pierre, un joven de buen corazón, al que sus egoístas hermanos obligan a irse de casa para quedarse con su herencia. Juntos emprenden el camino hasta que conocen a la princesa Rosa, a quien tendrán que salvar de casarse con el ogro Lucifer. El éxito de la película fue tal que su personaje principal se convirtió en la imagen corporativa de la compañía de anime Toei Animation”.



   Y precisamente la cinta es divertida y entrañable. Pero, así se llama el gato con botas, es acusado de ayudar a un ratón y condenado a la horca. Sin embargo, es inteligente y astuto y no dejará que la vida se le vaya. En su huida, tres gatos serán los encargados de capturarlo a como dé lugar.

   En su escape, Pero conoce a Pierre, un niño cuyos hermanos le arrebatan la herencia paterna. Tratando de ayudarlo, el gato con botas descubre que el rey de la comarca quiere casar a su hija y se encarga de que Pierre, humilde hijo de un campesino, se haga pasar por un acaudalado marqués. Con ayuda de toda una pandilla de ratones, el gato inclinará las cosas a favor del chico para que este abandone la pobreza y encuentre el amor.

   Pero el ogro Lucifer, lleno de ambición y de poder mágico, deseará casarse con la princesa a cualquier costo y no dejará que nadie se interponga en su camino.

   La cinta es entrañable, muy movida y divertida. Las constantes y eternas luchas de los tres gatos con Pero harán que más de uno se muera de la risa. Del mismo modo, la pandilla de ratones que ayudan al gato con botas le darán un peso importante a la trama. Todo está lleno de peleas con espada y magia, de persecuciones chuscas al por mayor. Incluso el humor utilizado en la cinta es sofisticado y encantará no sólo a los niños, sino también a jóvenes y adultos.

   En resumen, una película sumamente entretenida, inteligente y divertida que garantiza hora y media de carcajadas.




lunes, 21 de julio de 2014

La gran aventura de Horus, príncipe del Sol

La segunda cinta de animación japonesa que he tenido la oportunidad de ver el domingo 20 de julio en la Cineteca Nacional es La gran aventura de Horus, príncipe del Sol. El resumen de la cinta, desde la página web de la cineteca, dice lo siguiente:

“Ambientada en el norte de Europa durante la Edad del Hierro, la historia narra cómo el valiente y joven Horus cumple con la última voluntad de su difunto padre: buscar y defender el pueblo que años atrás fue arrasado por el demonio Grunwald. Sólo la espada del Sol podrá acabar con el demonio y para ello necesitará la ayuda de los hombres del pueblo. Primera película dirigida por Isao Takahata, que además contó con Hayao Miyazaki como parte del equipo de animación”.



   La película es un adelanto de las producciones que en unos años se llevarían a cabo en el famosísimo Studio Ghibli. Isao Takahata, con el apoyo de Hayao Miyazaki, construye un personaje juvenil que ya veremos en futuras producciones: un chico con una energía gigantesca y una fuerza extraordinaria que, pese a las adversidades, tiene la capacidad para inclinar la balanza y salvar el día. Dicha idea incluso ya la vimos en la primera serie dirigida por Miyazaki en 1978: Conan, el niño del futuro.

   Aunque me parece que la cinta presenta algunos elementos inspirados en las producciones occidentales (se ha dicho incluso que Miyazaki tiene un componente muy anglosajón o europeo en sus producciones). En esta línea, la historia nos habla de un héroe que llega para cambiar las cosas, de un aliado del villano en turno que está en una especie de crisis, de un momento en el que el héroe pierde credibilidad frente a quienes ha salvado, y, finalmente, en la batalla final en la que un arma especial permitirá que Horus obtenga la victoria.

   En cuanto a la animación, la cinta es de 1968, más podemos observar que hay un trabajo elaborado en los trazos y dibujos que nos produce una especie de sentido de la maravilla frente a lo fantástico. Producciones posteriores de Takahata y Miyazaki explotarán con creces este elemento.

   La historia en sí en para niños y jóvenes, mas muchos adultos también disfrutarán de la misma. Hay escenas muy chuscas y personajes entrañables. También hay animales humanizados que fungirán como los grandes compañeros de los héroes (Una curiosidad es que la ardilla que aparece en la peli no tiene una voz agudizada como se acostumbra en occidente, aspecto que se agradece).


   En definitiva, una película juvenil que corre muy bien, tiene final feliz  y que dejará satisfechos a todos.




El conejo de cristal

Continuamos en la Cineteca Nacional con un domingo lleno de animación japonesa que se disfruta en la pantalla grande y con sala de cine abarrotada. En esta ocasión tocó el turno de El conejo de cristal, cinta que inauguró el ciclo de anime el pasado jueves 17 de julio de 2014.



   En el recinto cinéfilo, la peli es presentada así:

El conejo de cristal conmemora los sesenta años del lanzamiento de la bomba en Hiroshima durante la Segunda Guerra Mundial. A través de la historia de la familia Ei -hijos y esposa de un afamado artesano del cristal- se da cuenta de los trágicos acontecimientos que se desencadenaron después del ataque nuclear. La historia relata cómo la familia, al tratar de reunirse de nuevo, es víctima de la situación crítica del momento”.

   Nos encontramos con otra cinta antibelicista al más puro estilo aunque no superior a La tumba de las luciérnagas. Nuevamente tenemos a una familia con niños japoneses que se enfrentan a los bombardeos y a la pérdida de sus seres queridos.

   De una forma cruda, la cinta nos cuenta la historia de Toshiko, una niña que sufrirá toda clase de calamidades al por mayor. Por un lado, su ciudad natal está siendo bombardeada y al inicio perderá su casa, a su madre y a sus hermanas menores. Más adelante, otra tragedia ocurrirá agudizando y haciendo aún más trágicos los acontecimientos que va viviendo.

   Sin embargo, siempre hay algo de esperanza. Los hermanos de la niña han sobrevivido, y gracias a uno de ellos y a la ayuda de otros parientes, Toshiko podrá levantarse frente a las adversidades y seguir con su vida hasta llegar a la tercera edad.

   Un aspecto que considero interesante es que la explosión de las bombas atómicas apenas y se mencionan. Si bien tienen un efecto importante en la trama, los realizadores se han concentrado en el aspecto humano de la historia y han dejado de lado otros recursos que quizás desviarían un tanto la atención del espectador.

   También resalta la animación. Hecha completamente a mano y sin mayores florituras, la historia maneja un elemento antibélico utilizado en muchas ocasiones: la idea de que las guerras no deberían existir debido a que muchas de las víctimas son civiles inocentes que sufren, lloran y pierden a sus seres queridos.

   Y en esta línea, la película no sólo ofrece un panorama desolador sobre los bombardeos, las ciudades destruidas, la infancia arrebatada y la muerte, sino que también ofrece un vistazo de una nación japonesa devastada moral y psicológicamente en donde el nacionalismo que se lleva en las venas ha sido humillado.

   Así, la cinta, realizada por encargo, tiene un fuerte componente propagandístico que habla sobre los riesgos de la guerra y las decisiones de la nación japonesa para que un acontecimiento de este estilo no vuelva a ocurrir nunca.

   En resumen, una película de animación poderosa, triste, que ofrece un panorama sobre las víctimas de la guerra pero, a la vez, con una moraleja bonita aunque un tanto artificial.






domingo, 20 de julio de 2014

Las aventuras de Anju y Zushio

Mi segundo día de animación japonesa en la Cineteca Nacional ofrece sorpresas y sala abarrotada. Hay mucha gente realmente interesada en el anime, género visual de culto que está dirigido a un nicho muy específico que incluye a miles de fans.



   El resumen de la cinta, directo de la página del mencionado recinto cinéfilo, dice lo siguiente:

“Adaptación del cuento clásico El intendente Sansho, que ya había sido filmado en 1954 por Kenji Mizoguchi. Un ambicioso oficial que desea destruir a un honesto gobernador, ordena a sus secuaces que lo capturen junto a toda su familia. A pesar de sus intentos por huir, el gobernador es capturado y muere en prisión. Sus hijos tienen algo más de suerte: son vendidos como esclavos al intendente. Con ayuda de sus amigos, uno de los hijos tratará de recuperar las posesiones arrebatadas”.

   En el caso de la cinta de animación, poco sabemos sobre el gobernador capturado. La historia nos cuenta las peripecias y tribulaciones de la familia y, en especial, de los hijos del gobernante después de que un cruel y ambicioso oficial, al no poder casarse con la hija de éste, incendia una región del bosque que forma parte de los dominios del emperador. Buscando la venganza, el oficial inculpa al gobernador, quien es acusado y encarcelado. La familia no tiene opción mas que escapar.

   En el intento de la familia por llegar al emperador para apelar la sentencia, la esposa y los hijos son engañados y convertidos en esclavos. A partir de ahí, ocurrirán varias situaciones y desgracias: la venganza del oficial ha surtido efecto, y por más esfuerzos para liberarse y buscar que la familia se reencuentre, el daño está hecho.

   La cinta nos muestra una animación japonesa distinta de lo que observamos hoy en día. Los personajes no tienen ojos enormes, sino que presentan rasgos característicos de las pinturas de los japoneses antiguos, entre éstos, destaca la piel muy blanca y los ojos rasgados.

   La cinta nuevamente nos transporta a varios siglos en el Japón antiguo, cuando la magia estaba a la orden del día. Mas un aspecto realmente sobresaliente es el papel que la naturaleza tiene en la historia. He leído que personajes como Godzilla, si bien alguna vez formó parte de ese terrible estigma japonés referente a la bomba atómica, ahora representa a la naturaleza que busca mantener el orden frente a unas insignificantes e inefectivas hormigas conocidas como los humanos. Muchas de las invasiones de monstruos gigantes representan a la naturaleza que reacciona frente al orgullo y arrogancia de la humanidad.

   Y en la película que nos compete, la naturaleza reacciona de una y mil formas frente a la desgracia. Si bien actúa favorablemente frente a quienes sufren injusticias, su papel es reaccionar frente a la maldad del hombre.

   También podemos ver en la peli el papel de los animales humanizados. Pese a que gran parte de la historia tiene un tono agridulce, los pequeños personajes le dan un toque de inocencia y carisma infantil a la cinta, alegrando por momentos la amargura de las situaciones que viven los personajes.

   En definitiva, otra gran cinta con buena banda sonora, una animación maravillosa, artesanal  y bien hecha para la época.



sábado, 19 de julio de 2014

La guarida de la serpiente blanca

Este fin de semana iniciamos en la Cineteca Nacional con el ciclo “La animación japonesa de posguerra”, películas de animación japonesa de distintas épocas en las que el talento de los animadores de su tiempo sobresale por doquier. La guarida de la serpiente blanca, primera cinta que he visto del ciclo, es presentada por el mencionado recinto para cinéfilos así:

"La primera película de animación japonesa a color es una adaptación del cuento chino La leyenda de la serpiente blanca. La razón de utilizar una historia china era la reconciliación entre ambas naciones. Cuando era joven, Xu-Xian tenía como mascota a una serpiente blanca, pero sus padres lo obligaron a deshacerse de ella. Años más tarde, la serpiente se transformó mágicamente en la hermosa princesa Bai-Niang y se reencontró con Xu-Xian".



   Lo primero que sale a la vista es que la animación está muy bien hecha para 1958 (hay cintas de animación de los 80’s que no tienen semejante calidad). Los personajes están bien delineados y tienen tanto atractivo que el espectador, esperando apenas ver un clásico, se encuentra con una película muy interesante, bien contada y con grandes dosis de humor.

   La historia nos habla sobre los conflictos para encontrar al amor. Bai-Niang es una serpiente mágica, mas se enamora de un ser humano. Cuando la relación parece haberse consolidado, un brujo enemigo de toda clase de espíritus malignos aparece en escena para frustrar el noviazgo. Pero el brujo no es ni bueno ni malo, sino un enemigo de los espíritus un tanto cerrado que cree que todo ser sobrenatural es demoníaco. Sin embargo, a la larga, descubrirá lo contrario.

   Los animales en la cinta tienen un gran papel. Dos animalitos, amigos de Xu-Xian, harán lo imposible por ayudarlo e incluso pondrán en su lugar a una peligrosa pandilla de animales que se dedica a robar a los comerciantes. En esta parte, la cinta adquiere un valor infantil muy divertido y que hará reír a niños y no tan niños.

   La visión de una China tradicional también sobresale en la película. En un tono costumbrista, el espectador puede descubrir con gran detalle cómo era aquella sociedad antigua costera de comerciantes y cirqueros.

   No está de más resaltar que la banda sonora es de primer nivel al grado que transporta completamente al espectador a una China antigua. Del mismo modo, la trama es riquísima en situaciones, factor que garantizará que el espectador no se mueva de la butaca.

   En resumen, una cinta clásica de animación japonesa que homenajea a su vecino chino y encantará a chicos y grandes.





jueves, 17 de julio de 2014

Especial Studio Ghibli: “Ocean Waves / Puedo escuchar el mar”

Seguimos de vacaciones y dándonos escapadas ocasionales para disfrutar de todas las películas de Studio Ghibli. Y en esta ocasión toca el turno a Puedo escuchar el mar, una cinta que aunque no contó con la participación de Isao Takahata y Hayao Miyazaki, sí cuenta con la participación de creadores jóvenes que unieron todo su talento para contarnos una historia cotidiana pero llena de vida.



   Concebida para transmitirse en televisión, la cinta nos cuenta la historia de Rikako Muto, una chica con toda clase de virtudes pero que a la vez tiene dificultades para adaptarse. A su vez, Taku Morisaki es un chico que se fija casi al instante en Rikako y tratará de ayudarla en sus problemas cotidianos.

   Sin embargo, Rikako también es conflictiva y mete en problemas a su pretendiente secreto. Y en esta línea, la estrategia de Taku para que la pareja se libre de los conflictos tendrá un peso importante en la historia.

   La historia en sí es una telenovela muy relajada de apenas una hora y unos cuantos minutos. La historia de amor con final distinto está a la orden del día y las vivencias de los jóvenes universitarios formarán parte del resto de la trama.


   En resumen, una historia muy sencilla y entretenida que tiene un público muy específico: los adolescentes que están a punto de pasar a la etapa adulta.


viernes, 11 de julio de 2014

La animación japonesa de posguerra

A partir del 17 de julio y hasta el 3 de agosto, la Cineteca Nacional, en colaboración con la Fundación Japón en México, ofrecerá una muestra muy variada de animación japonesa. Sobresalen algunas películas poco conocidas, cintas de los 50's en adelante, ciclos de cortometrajes, directores invitados y hasta algunas de las cintas más conocidas de Hayao Miyazaki. Así que no lo olviden, vale la pena un ciclo como este para disfrutar de cintas de distintas décadas en la gran pantalla.

Aquí pueden ver más detalles y descargar el programa completo.


Anime en el IPN

Esta semana quiero invitarlos al ciclo de animación japonesa que se celebrará en diferentes escuelas del Instituto Politécnico Nacional de México.

   La opción vale la pena: de agosto a diciembre podremos disfrutar de algunas de las mejores cintas japonesas que se han presentado en diferentes festivales a lo largo y ancho del mundo. Revisen la página y la cartelera aquí.

 

Especial Studio Ghibli: “Porco rosso”

Seguimos de vacaciones disfrutando de algunas de las películas pendientes en el anaquel familiar. Y en esta ocasión, toca el turno a Porco rosso, quizás una de las cintas más adultas y occidentales que Hayao Miyazaki nos ha regalado.



   
   La historia nos adentra en el periodo de  entreguerras, y nos relata las travesías y aventuras de Marco Pagot, una especie de piloto del ejército y pirata aéreo que ha huido de su país y se dedica a realizar toda clase de trabajos como cazarrecompensas.

   Pero hay un placer de Pagot por frustrar los esfuerzos de la competencia. Él domina el mar Adriático, y cualquiera que desee hacer negocios en su territorio se tendrá que vérselas con él.

   La cinta juega con distintos misterios. Por un lado, nunca está del todo claro por qué ha adquirido esa especie de maldición en la que su cabeza tomó la forma de la de un puerco. Asimismo, el final es demasiado juguetón: nunca nos enteramos si regresa a la normalidad o sigue con su maldición.

   Pero hay dos aspectos que me gustaría resaltar de esta cinta.

   El primero de ellos es el gran homenaje al cine negro. El nombre de Donald Curtis, uno de sus más férreos enemigos de Pagot, recuerda a la famosa familia de actores Curtis. Pero además, la cinta transmite el espíritu del cine de los 50’s con los enfrentamientos entre rivales, con los centros de baile y la música, con las historias de amor que no terminan bien. De hecho, la peli ofrece una historia de amor tan interesante como triste: el amor imposible en su máxima expresión, en el que la doncella ama a Pagot y él, debido a su maldición, nunca podrá estar con su amada.

   El segundo aspecto a resaltar es el placer de Miyazaki por los aviones. Siendo un gran admirador de la aviación, el director nos ofrece escenas detalladas del funcionamiento de estos aparatos, de cómo planean, de cómo es que se construyen o reparan.


   En resumen, una cinta memorable que fascinará a los gustosos del cine estadounidense de antaño y que posee el sello característico de su director.


sábado, 5 de julio de 2014

Jyu Oh Sei

Seguimos aprovechando las vacaciones para disfrutar de algunas series pendientes que andaban arrumbadas en la habitación. A su vez, continua mi revisión de algunas series importantes del estudio Bones.



  En esta ocasión tocó el turno de Jyu Oh Sei, serie cien por ciento de ciencia ficción que esconde agradables sorpresas al espectador gustoso de este género.

   La historia nos ubica a varios siglos en el futuro. La humanidad ha logrado colonizar un sistema planetario conocido como Balkan y ha terraformado sus mundos para habitarlos. En una de esas, los gemelos Thor y Rai viven cómodamente en uno de aquellos mundos: el primer hermano es fuerte y decidido, mientras que el segundo en nervioso y débil.

   Pero sorpresivamente ocurre una tragedia: los gemelos de 11 años descubren que sus padres han sido asesinados. Luego de ser adormecidos, los niños despertarán y descubrirán  que han sido enviados a Quimera: un mundo hostil habitado por plantas carnívoras súper desarrolladas que funge como prisión.

   Una vez ahí, Thor tratará de descubrir quién asesinó a sus padres y buscará la forma de regresar al mundo en el que nació. No obstante, ocurrirán varios sucesos que complicarán la aventura: Rai morirá víctima de una extraña planta carnívora.

   Cuando Thor avanza, descubre que aquel mundo se ha dividido en cuatro anillos, cada uno con su gente y gobernado por un líder. Se cuenta que en una lucha entre los cuatro líderes, quien sea el vencedor se convertirá en el Jyu Oh Sei, el Rey Bestia, y tendrá derecho a regresar a casa.

   En su viaje, Thor encontrará algunos buenos amigos que lo ayudarán a escalar posiciones. Sin embargo, conforme se acerque a la cima encontrará algunas verdades que tendrá que afrontar de una u otra forma.

   En el juego de nombres nórdicos y germanos, la serie ofrece un contexto de ciencia ficción creíble y bien desarrollada. Por momentos, la vista de Quimera es extraña y desconcertante y vaya que consigue emocionar al espectador y hacerle creer que en realidad se trata de un mundo alienígena.

   La historia también juega con algunos elementos de las historias de espada y brujería (aunque sin ésta última). Hay luchas con espadas, pueblos con reglas, guerreros, y un sinfín de personajes. A su vez, la trama juega bien con el romance y nos habla sobre un triángulo amoroso con todo y sus conflictos.

   Hay una cosa que sí me dio risa. Thor tiene once años cuando llega, mas cuando tiene quince y se vuelve el líder del anillo, su porte es más de un súper modelo de 35 años que dedica varias horas al día para su arreglo personal en lugar del de un simple adolescente.

   Pese a que al final conocemos a Odín, la mente detrás del asesinato de los padres de Thor y de los experimentos genéticos para crear una nueva raza humana resistente a las condiciones extremas de los planetas que se han terraformado, creo que el desenlace es completamente fallido. Se abusa de los clásicos clichés en donde los acompañantes del personaje van muriendo uno por uno en actos valerosos de sacrificio. También algunos personajes que no merecían morir lo hacen y otros logran sobrevivir. La muerte de Tiz, el gran amor de Thor, es por demás forzado y un tanto absurdo.

   En resumen, una serie corta de ciencia ficción que empieza muy bien y que termina de forma fallida, irregular y precipitada.



   

viernes, 4 de julio de 2014

Especial Studio Ghibli: “Recuerdos del ayer”

Si les gustan las películas de la gustada animación japonesa y, en especial, las que los hacen desparramarse en lágrimas, esta cinta sencilla y al parecer sin chiste seguramente encontrarán una grata sorpresa.



   Studio Ghibli es como el Pixar de Japón. Sus películas son consideradas como bellos trabajos que transportan al espectador a mundos mágicos sin igual. Pese a que muchas de las historias del estudio son de fantasía, aquellas que podrían ser “realistas” en realidad convierten lo cotidiano en algo fantástico.

   Y Recuerdos del ayer no es la excepción.

   Isao Takahata, otro de los grandes de este estudios, estuvo detrás de la dirección de esta cinta. El propio Hayao Miyazaki estuvo involucrado en la producción.

   La historia nos habla de Taeko, una joven adulta que viaja al campo para pasar las vacaciones con sus parientes. Entre toma y toma, Takahata nos regala deliciosas tomas costumbristas sobre cómo se obtienen y preparan diversos cultivos.

   Pero la protagonista trae una especie de fuerte nostalgia por lo que vivió alguna vez en quinto año de primaria. Así, podemos conocer que en nivel  escolar, Taeko tenía talento para la actuación, tuvo buenos amigos, algunos bonitos amores y algunas gratas vivencias con la familia.

   Con respecto a esta última, el director nos ofrece un panorama de la familia japonesa en la que pese a que todos opinan, la figura paterna, seria y lectora del periódico, es quien tiene al final la última palabra.

   En su viaje al campo, Taeko encontrará el amor y aprenderá que pese a que las vivencias del pasado fueron grandiosas, uno debe dejarlas ir.

   Una de las escenas del final me parece sumamente conmovedora. En la misma, Taeko viaja de regreso a la ciudad en medio de tantas dudas y, a manera de símbolo, se encuentra en el transporte con todos sus compañeros, quienes la convencen de regresar. Al final, se va sin ellos mientras que la observan alejarse. Esto me parece una hermosa escena sobre lo bello del pasado que uno al final debe dejar atrás.


   En resumen, una historia realista y costumbrista que a partir de lo cotidiano nos contará una poderosa historia sobre la vida misma.